Estudiar: A Propósito del Día Internacional del Estudiante

Estudiar…

Rolando J. Núñez H.

rolandonunez70@hotmail.com

“Si pasas tres días sin estudiar

Tus palabras perderán sentido”

(Proverbio Chino).

           

Estudiar es aprender, sí, pero estudiar es también olvidar y desaprender ciertos tópicos y clichés que han ido entrando por lo que hemos oído y visto por ahí. Estudiar es aprender, sí, pero no “aprenderme” cosas porque eso suena más “caletrear”, y el “caletre” es más a “ver y repetir”. Estudiar, a veces, no puede estar desligado de la memoria, pero no de una memoria mecánica, irreflexiva, esa se desgasta y se extingue en muy pocas horas; la memoria efectiva suele ser la afectiva, la significativa.  

            Estudiar es volver, una y otra vez, sobre el mismo texto, los mismos apuntes, las mismas notas; sumergirme, empaparme y que ese texto vaya siendo asimilado por mí como los alimentos van siendo incorporados por mi cuerpo hasta convertirse en parte de él; que así como somos lo que comemos seamos lo que leemos, lo que estudiamos.

            Estudiar es meditar. “Buscar leyendo y hallareis meditando”, decía San Juan de la Cruz. Es decir, estudiar es pensar, re – pensar y reflexionar sobre lo que leo y la relación que eso que leo tiene con la realidad, con mí realidad.

            Estudiar es leer, es re – leer; es acercarse a los autores y a los libros para comprenderlos y para tomar de ellos lo que creo que es valioso y tomar distancia de aquello que creo que ya no tiene vigencia, o es contrario a mi perspectiva ética y moral.

            Estudiar es escribir, es reescribir y sobre escribir; estudiar es apostillar, subrayar, destacar y resaltar, ya sea porque lo que estoy leyendo/estudiando me parece de la mayor relevancia o porque aquel texto escrito me parece cuestionable, dudoso, insostenible.

            Estudiar es debatir, es oír, es escuchar y hacerse oír; es plantear preguntas y compartirlas con mis pares académicos. En el fondo estudiar es consenso pero también puede ser disenso.  Es conseguir puntos de encuentro y líneas de fuga.

            Estudiar es producir conocimiento, problematizar la realidad/mi realidad y generar conocimiento nuevo.

            Estudiar es gozo aunque puede llegar a ser, en algunos momentos, padecimiento, agonía, eso también es parte del aprendizaje; porque estudiar es disciplina, adquisición de hábito, búsqueda de la virtud.

            Estudiar es vivir, experimentar, observar, palpar, oír; gustar y degustar. Estudiar también tiene un filón sensual que muchas veces dejamos de lado. Al estudiar se goza aunque a veces podemos llegar a sufrir…