La Vocación Democrática del Venezolano: Don Mercedes Hernández

Don Mercedes Hernández: La Decisión de Ser un Demócrata


Rolando J. Núñez H
@Sisifodichoso

“La libertad supone responsabilidad,
por eso la mayor parte de los hombres le teme tanto” (George Bernard Shaw).


Para los existencialistas (Kierkegaard, Sartre, Camus, etc) siempre, siempre tomamos decisiones; según estos pensadores, no podemos no decidir pues aun en el caso de que decidamos no decidir ya ahí estamos decidiendo; y esto aplica en todos los ámbitos de la vida, incluido el político. Por tanto, eso de que la gente elige o sostiene a gobiernos corruptos porque no sabe, o no fue su decisión, es como difícil de sostener.

Mi abuelo, que no leyó nunca a los existencialistas pero actuaba, en muchos sentidos, como decían ellos, hizo opciones y tomó decisiones toda su vida, también en lo político, eso sin conocer mucho del tema. Mi abuelo, nunca dejó de ir a votar pero normalmente no le gustaba que le preguntaran por quién había votado; ante la pregunta indiscreta, respondía siempre en tono de broma: "por la del gallito", respuesta que además sugería que él jamás iba a votar por la izquierda, otra sabia decisión, como vemos ahora, casi treinta años después; para él, era su obligación votar aunque no lo era militar en ningún partido; era su decisión actuar como ciudadano. La otra decisión que siempre le vi tomar (sin anunciarla, sin vanagloriarse de ella) era no esperar mucho de los políticos, incluso verlos con cierto recelo.
Esa distancia con los políticos no era puramente retórica, era más bien existencial; mi abuelo se levantaba a trabajar todos los días a las cinco de la mañana, a trabajar en lo que sabía hacer: en el campo, la agricultura. Nunca lo vi esperando una pensión o una bolsita de comida regalada por el gobierno. Mi abuelo fue un hombre sabio que nunca fue a la escuela pero que vivió su vida tomando decisiones, ejerciendo su libertad, que es ante todo la capacidad que tenemos de optar, de asumir posturas. Eso es lo que yo llamaría un espíritu democrático. Un hombre que representó el talante democrático del pueblo venezolano  de los últimos cuarenta años del siglo veinte venezolano. Casi no salió de Canoabo, de Canoabito, en el occidente del estado Carabobo, pero, en ese apartado paraje de nuestra geografía dio lecciones de vida y de ciudadanía que hoy parecieran la excepción, más que la norma, pero que son las que más necesitamos para salir de la crisis que, antes que política y económica, es moral; es aquí donde precisamente se junta moral, ética, y política, en la vida, en la cotidianidad, en la existencia concreta  y vivida.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Pensamiento Filosófico y Pedagógico: David Hume

¿Cómo escribir ensayos?

Doxa y Episteme: Opinar, ¿Negación del Pensamiento?